Cómo explicar a los niños que hay personas malas que les pueden dañar
Los padres quieren proteger a sus hijos lo máximo posible, protegerles de todo mal que pueda haber a su alrededor, y bien sabemos, como adultos que somos, que hay gente que puede hacer daño intencionado a nuestros hijos... Hablamos de situaciones de abuso, secuestro, conflictos, violencia... ¿Cómo se puede explicar a los niños que existen personas malas que pueden dañarles? ¿Cómo conseguir que sean prudentes sin que le cojan miedo a todo? Explicar a los niños que hay personas malas Si hiciéramos una lista de todas las tareas y responsabilidades que tenemos como madres y padres... realmente no sé si algún día la acabaríamos, pues cada etapa de crianza requiere atender situaciones nuevas y diversas, y de la misma manera cada hija o hijo es especial y único. Atender su alimentación, descanso, potenciar un ocio saludable, inculcar unos valores sólidos que vean en casa, acompañarlos en las tareas escolares, aconsejarles y guiarles en el plano emocional y social... y además darles las herramientas para que se cuiden, sean responsables y autónomos. Enorme responsabilidad, ¿verdad? Y sumado a todo lo anterior, los padres queremos proteger a nuestros hijos e hijas de todos los posibles daños que les pudieran hacer o situaciones peligrosas a las que se pudieran exponer... La realidad es que en este mundo que nos ha tocado vivir, hay personas malas que pueden tener intenciones dañinas hacia nuestros hijos e hijas, y cuando digo malas hago referencia a maltratos, abusos, extralimitaciones, secuestros... y cierto que al pensarlo se pone el bello de punta. Cómo hablar con los niños sobre gente que les quiere dañar 1. Les podemos empezar contando que la vida está llena de opuestos; que existe el día porque existe la noche, explicándoles que para que tengamos el sol, la luna 'se va a dormir' y al revés; que para que exista esa luz, es necesaria que exista la oscuridad... Es posible que ellos inicien un juego de opuestos... en cuanto a colores, formas o tamaños. 2. Los opuestos nos ayudan a identificar y clarificar muchos conceptos en nuestro día a día. 3. Explicar el concepto del bien y del mal a los niños puede resultar complejo, todo dependerá de su madurez y fundamentalmente de los valores que vivamos en casa. Debemos tener en cuenta que son conceptos muy amplios y es importante saber a lo que hacen referencia. 4. Por ejemplo, les podemos contar que un niño puede decidir llevarse un borrador del colegio en su bolsillo, a pesar de que sabe que no le pertenece y que su lugar es la escuela. Y además les podemos añadir que es posible que no se lo cuente a nadie, pues ese niño sabe que eso no es adecuado hacer. 5. Aquí podemos comentar con ellos lo que es adecuado y lo que no... quizá aproximándonos a los términos de 'mal' y 'bien'. Es muy probable que salgan más ejemplos de su día a día que nos servirán para seguir compartiendo con ellos. Y es que para que exista el bien y poder entenderlo, es necesario saber cuál es su opuesto. 6. Si vemos al pequeño receptivo y consideramos que sigue siendo un momento adecuado, le podemos dar la información de que hay personas que hacen mal, que hacen daño a los niños. Es posible que se sorprenda, que se asuste o que incluso lo niegue... 7. No es cuestión de inculcar el miedo y la inseguridad, todo lo contrario, es momento de decirles esa serie de cosas que tantas veces, cuando éramos pequeños, también nos decían en casa: no te vayas con desconocidos, no comas nada que te den en la calle, si alguien te hace algo que no te gusta me lo debes contar... Hablar de abusos o secuestros sin que los niños tengan miedo de todo El día a día con los niños nos da la oportunidad de inculcarles estos mensajes que queremos que les lleguen con amor. Por ejemplo, en el momento del baño o de aplicarles la crema, podemos hablar de lo importante que es cuidar el cuerpo por fuera, de que su cuerpo les pertenece y nadie lo puede tocar (excepto mamá o papá). Cuando vamos al parque o alguna zona de ocio, ya que son espacios grandes y con mucha gente, para no perdernos nadie y disfrutar más de nuestra compañía, es importante ir juntos y cuidarnos unos de otros. Que si alguna persona le hace sentir incómoda pues le pide que haga cosas a escondidas, por ejemplo, que siempre debe contarlo a mamá o papá, ya que en todo momento van a entenderle. Cuando alguien les habla de tener un secreto solo ellos dos, es cuando más nos lo tienen que contar. Es posible que nos cueste enfrentarnos a este tipo de mensajes o conversaciones con nuestros niños y niñas, pero es necesario. Igual que hablamos de educación emocional o sexual, concienciar a nuestros hijos de esta realidad (que existen estas personas malas que pueden querer dañarnos), desde el autocuidado y la responsabilidad, es tremendamente necesario. …Para leer el texto completo, acudir a esta fuente. |