VALORES DISPONIBLES PARA INFANTIL Y PRIMARIA: Autocontrol, Laboriosidad, Autoestima, Orden, Amor al esfuerzo y el trabajo conjunto, Creatividad, Valentía, Flexibilidad, Paciencia, Responsabilidad, Honestidad, Amor y comprensión, Sensibilidad, Veracidad, Perseverancia, Curiosidad, Resiliencia o Tolerancia a la frustración, Confianza en sí mismo, Independencia, Persistencia, Amabilidad, Confianza mutua, Amor filial, Cooperación y ayuda mutua, Amor y comprensión, Amistad, Bondad, Amor a la naturaleza, Respeto a lo ajeno, Generosidad, Justicia, Compasión, Colectivismo, Obediencia, Libertad, Gratitud, Respeto del bien común, Sinceridad, Amor a lo nuestro o Patriotismo, Tolerancia, Respeto a la Diversidad, Solidaridad.
Los
agentes educativos somos facilitadores de las experiencias y relaciones que
facilitan una progresiva madurez social al niño. Los niños, a
través de sus experiencias seleccionan, eligen y hacen suyo un sistema
de valores que les ayudará a desarrollar una conciencia moral y a adquirir
el compromiso Individual de organizar su conducta llevándolos a la práctica.
Tenemos que ofrecer una guía de conducta al niño o la niña
desde su primera infancia promoviendo la madurez interna necesaria para adquirir
una conciencia autónoma.
Para aprender a vivir juntos, será imprescindible educar desde la primera
infancia las normas por las que se rige, o debería regirse, esta convivencia.
Si “Educación Temprana” la hemos definido en multitud de
ocasiones como aquella encaminada a 'desarrollar la personalidad, las aptitudes
y la capacidad mental y física del niño hasta el máximo
de sus posibilidades', hoy podríamos afirmar que es aquella encaminada
al desarrollo de la personalidad, y de los valores, que nos permiten la convivencia,
hasta el máximo de sus posibilidades.
Uno de los grandes desafíos de la educación de valores es pasar
de la enunciación, de la proclama, del consejo, de la moraleja, del dicho...
al hecho. Y, para ello, son necesarios los buenos ejemplos de acción,
los modelos de comportamiento a imitar y la propuesta de actividades y experiencias
que favorezcan el desarrollo y fortalecimiento de la personalidad del niño.
Pero un programa de actividades dirigido a niños y niñas de estas
edades no puede ser uniforme, por ello hemos elegido experiencias que, con estrategias
sencillas, puedan individualizarse y adaptarse con facilidad a las necesidades
comunes del grupo que lo desarrolla y a las individuales de cada niño
o niña.
Para llevar a cabo un adecuado programa de trabajo los docentes tenemos que
planificar nuestra actuación ante el grupo.
Puesta en
marcha:
1º. Reflexionamos sobre el programa: ¿Cómo iniciamos
el programa?
1.Reunión del equipo docente.
2.Informar e involucrar a todos los profesionales del centro sobre el programa.
3.Informar a las familias
Es importante para
cada profesor, escuela y / o el sistema escolar para atender a las necesidades
de los niños y desarrollar un programa adaptado a la situación
particular, por ello sería importante realizar una reunión con
los profesionales del centro en la que se reflexionara sobre qué personas
queremos formar, para que sean capaces de enfrentarse a la realidad del mundo
actual y su problemática. En función a la persona que queramos
formar, trabajaremos por una escuela que forme personas crítica y capaz
de transformar la sociedad en otra más justa y solidaria. El establecimiento
de valores y su consenso debe partir del contexto en que se integra el Centro.
Los valores asumidos por la comunidad educativa impregnarán los planes
de trabajo en el centro y la organización de este.
El centro debe y tiene compartir con la familia la labor educativa, completando
y ampliando las experiencias formativas del desarrollo. Para que esta labor
se realice correctamente, la comunicación y coordinación entre
los padres y los maestros es de gran importancia ya que los logros del desarrollo
de los niños, y su apropiado ajuste social, solo pueden alcanzarse cuando
existe una unión efectiva entre el hogar y el proceso educativo.
2º Planificamos: ¿Cómo
y por qué planificamos la secuencian de los valores seleccionados?
Necesitamos planificar para crear o determinar el camino que nos lleva a conseguir
unos objetivos. Se puede optar por diferentes formas de planificación
del programa. Opciones de planificación:
Primera Opción Determinar los valores fundamentales a trabajar
a lo largo del curso escolar y tener en cuenta la implicación de los
demás para cada uno de los valores seleccionados. Ejemplo:
1er Mes: Amistad, Respeto al bien común, Respeto a la diversidad, Tolerancia
y Sinceridad
2° Mes: Solidaridad, Amor al esfuerzo y al trabajo conjunto , Responsabilidad,
Paciencia, Honestidad, Respeto a la diversidad
3° Mes: Generosidad , Esfuerzo, Amor y comprensión , Bondad, Amabilidad
2° Opción Determinar el valor o valores de más implicación
con el eje globalizador de una terminada situación de aprendizaje valorando
las características de los niños y del contexto social y familiar.
Ejemplo:
Situación de Aprendizaje: La casa en la que vivimos
Eje globalizador: La vivienda y el núcleo familiar Valores
Formación del yo - Formación del yo y de los demás: Independencia,
Sinceridad , Responsabilidad, Amor filial, Orden, Obediencia, Confianza en sí
mismo, Tolerancia
3° Las
actividades: ¿Cómo seleccionamos las actividades?
Dependiendo de la opción tomada en la planificación para le curso
escolar de los valores seleccionaremos las actividades y experiencias directamente
relacionadas con el valor a trabajar y con los que están implicados en
el trabajo con este.
¿Cuándo llevar a cabo las actividades en el salón o aula?
Los valores son, naturalmente reforzados durante todo el día pero las
actividades específicas seleccionadas para este fin pueden ser fácilmente
incorporadas a la hora de apertura, el tiempo de asamblea en un periodo de rutina
creado espacialmente dentro del horario escolar.
4º
Valoración: Al final del curso escolar el docente enviará las
conclusiones de la puesta en práctica del programa.