La Iniciativa sobre Efectividad
(Effectiveness Initiative - EI) es una búsqueda con profundidad
de los aspectos cualitativos que hacen que un programa funcione con relativo
éxito en un contexto particular. Las consecuencias que acarrea
dicho programa a la gente que está involucrada en él y a
las comunidades y culturas que son atendidas y enriquecidas como resultado
directo e indirecto de su ejecución. Sus objetivos específicos
son:
La creación de un espacio de diálogo
entre programas de diferentes países y agencias acerca de los
retos de los `programas efectivos dirigidos a la infancia (Early Childhood
Development – ECD)
La facilitación de una mejor comprensión
de la relación entre los procesos, actividades y productos de
un programa.
La delineación de mapas acerca de los contornos
de la efectividad, definiendo qué es lo que hace efectivo a un
programa, bajo cuáles circunstancias, cuáles son sus soportes
y sus lastres en un contexto determinado y qué puede decirnos
ese entorno específico sobre programación a un nivel más
general.
Para el logro de estos objetivos,
se ha reunido a un grupo de personas con diferentes trayectorias y experiencia,
proveniente de diferentes países y organizaciones no gubernamentales,
con el fin de diseñar y ejecutar 10 estudios de programas de infancia
en igual número de países de Europa, Asia, Africa y América
Latina. Para ello, deberán diseñar estrategias y herramientas
de exploración, que garantice la participación plena de
los interesados, afectados y agentes de cada programa, así como
la diseminación intercultural e internacional de sus resultados.
No existe ninguna otra imposición metodológica sobre los
diferentes equipos. Cada equipo por país diseña su propia
estrategia a partir de un marco analítico inicial.
Antecedentes y aproximación
metodológica
El Plan Estratégico de la Fundación
(1996-2001) declara nuestra intención de explorar sistemáticamente
el impacto programático y la eficacia. Experiencias previas (tales
como la Conferencia de Lesotho en 1991, El Ambiente del Niño en
1995) enfatizaron la importancia del contexto. Esto ha sido aún
más enfatizado recientemente con el trabajo sobre Accesos relacionados
con la Cultura (1998), la Base de Datos del Proyecto Histórico
(en el que se analiza proyectos anteriormente asistidos por la Fundación)
y ayuda para Estudios de Investigación escogidos. La presente propuesta
está específicamente diseñada para dar una profunda
atención al contexto de tal manera que nos permita ampliar
lecciones aprendidas en la implantación de las intervenciones del
desarrollo prematuro de la niñez (ECD) a través de amplios
y diferentes ambientes.
El objeto central de la Iniciativa
sobre Efectividad es un estudio profundo y contextual de diez programas
de desarrollo infantil (ECD) con buena reputación en la práctica.
Nuestra definición de trabajo de un programa efectivo de desarrollo
infantil (ECD) es aquel que reúne las necesidades culturales
y de desarrollo de los niños y de sus familias de manera tal que
les permite prosperar.
Metodológicamente, hemos rechazado
la investigación cuantitativa que permitiría abarcar una
gran cantidad de proyectos. En vez de esto, hemos optado por una aproximación
antropológica, basado en técnicas de observación
participante, para evaluar a un grupo relativamente pequeño de
proyectos. Nuestro enfoque estará en los procesos encaminados hacia
la creación e implantación de proyectos que permitan que
los niños y sus familias se desarrollen.
Un rasgo importante de la Iniciativa
sobre efectividad es la oportunidad que proporciona para unirse en
sociedades con donantes claves, agencias internacionales y programas de
infancia. Ya que queremos garantizar legitimidad y transparencia, hemos
reconocido que socios importantes deben estar involucrados desde el principio
formando conceptos, desarrollando metodologías, buscando proyectos
y guiando el proceso.
Esta propuesta es el resultado de
doce meses de trabajo preparatorio, durante los cuales se hicieron revisiones
de proyectos de niñez prematura que se consideraban como "eficaces".
Un marco conceptual comenzó a surgir y un primer borrador de propuesta
se desarrolló en la Fundación. Esto ha sido ampliamente
compartido internamente, así como externamente a través
del Grupo Consultivo sobre Cuidado y Desarrollo de la Infancia.
Un comité consultivo de expertos
externos ha jugado un role importante en perfeccionar la propuesta. Está
compuesto por miembros de la Fundación Aga Khan, el Fondo Cristiano
de Niños, Salven a los Niños (USA), Redd Barna, UNICEF,
la Universidad de Duke, el Grupo Consultivo sobre ECCD (Cuidado y Desarrollo
de la Infancia), y el Taller de Televisión de los Niños
Filipinos.
Una parte de las preparaciones fue
poner a prueba los supuestos y la factibilidad de la iniciativa. De este
modo, se realizó una visita al lugar de uno de los proyectos potenciales:
la Organización de las Mujeres Autoempleadas (SEWA) en India. Esta
visita proporcionó un entendimiento acerca de las clases de interrogantes
que los proyectos se hacen a sí mismos y reforzó el valor
de comprometerse en un diálogo desde el principio. Clarificó
las preguntas a hacerse en el esfuerzo completo y en la metodología
propuesta. Este trabajo fue emprendido paralelamente con la propuesta
escrita y la identificación de los investigadores, grupos, y proyectos.
Como consecuencia de esta visita, se ha incluido una etapa de negociación
con cada proyecto como una etapa inicial de la Iniciativa sobre efectividad.
metas
La meta inicial de la Iniciativa
sobre efectividad es proveer un entendimiento sólido de cómo
se logra la eficacia en el desarrollo de la infancia (ECD). Los objetivos
específicos son:
Identificar las dimensiones de
proyectos en diferentes países que conduzcan a la eficacia.
A través de la combinación de tres estrategias de fondo
--estudios de caso, grupos y ejercicio de sondeo-- aspectos de la eficacia
(particularmente lo que se ha experimentado, qué es lo que funciona
y lo que no funciona) serán ampliados y sobrepuestos en cada proyecto
para llegar a un análisis compuesto de intervenciones eficaces
en el nivel más alto de desarrollo de los programas de infancia
logrado dentro del tiempo propuesto.
Asistencia en la transparencia
y aprendizaje mutuo. La Iniciativa sobre efectividad está
siendo desarrollada en sociedad con los proyectos y con otros donantes.
El proceso implica un diálogo continuo entre la Iniciativa sobre
efectividad y el personal del proyecto. Como resultado, las búsquedas,
los conocimientos profundos y la comprensión serán impartidos
en forma conjunta por practicantes, donantes y expertos, haciendo así
posible que los resultados sean asimilados en el curso del ejercicio por
agencias participantes, proyectos y personal involucrado.
A través de la Iniciativa
sobre efectividad se formará, modificará, probará
y documentará una metodología para ir más allá
de una evaluación individual del proyecto y aumentar nuestra comprensión
de eficacia dentro del sector de la infancia. Esto sirve por lo menos
a dos propósitos. Primero, el más importante, proveer a
la Fundación y a sus socios de un canal de comunicación
directa con las bases para realizar cambios acerca del desarrollo sistemático
de las intervenciones futuras en el área de la infancia. Segundo,
y como producto accesorio, se documentan las herramientas y métodos
desarrollados para y por el sector del desarrollo infantil (ECD) y se
hacen disponibles para su modificación y adaptación en otros
contextos de aplicación.
En su totalidad, la Iniciativa
sobre efectividad depende de la combinación de cinco componentes
en todas sus etapas. Tres de éstos forman el núcleo de la
estrategia y se describen más ampliamente abajo: la selección
de proyectos; la formación y combinación de grupos cuidadosamente
examinados; y la adopción de un marco analítico conceptual
del sondeo para examinar los lugares donde se realizaría el estudio.
El cuarto componente es un intento
de balance y combinación entre perspectivas: aquélla del
espectador interno (concepto de actor) y aquélla del espectador
externo (concepto de observador).
El quinto componente es la preparación
adecuada y realizar negociacionescon proyectos seleccionados para
asegurar la claridad de las expectativas entre todas las partes y las
consultas al nivel de cada proyecto en cuanto a la metodología
de recolección y análisis de datos.
Los proyectos seleccionados fueron:
Samespel de los Países Bajos, Agueda de Portugal, Madrasa de Kanya,
las escolinhas comunitarias de Mozambique, Sewa de India, Almaya de Israel,
Mount Pinatubo de Filipinas, Madres Guías de Honduras, Promesa
de Colombia y Pronoei de Perú.
No hubo la intención de llevar
a cabo un ejercicio que solamente definiera la validez relativa de las
diferentes aproximaciones de cada programa, ni de llegar a una estructura
jerárquica en la cual pudiéramos identificar los "mejores"
o más "eficaces" métodos. Por lo tanto, se ha tratado de
evitar el cliché de los diferentes modelos. A parte de eso, sin
embargo, sí consideramos importante incluir con un "bufete" de
estrategias y metodologías donde haya diferentes elementos de eficacia,
y esto se refleja en la selección de proyectos. Adicionalmente,
los proyectos se encuentran localizados en diferentes regiones geográficas.
Cinco de ellos reciben ayuda de esta Fundación, mientras que los
otros cinco no.
En abril de 1998, se solicitó
nombres de proyectos potenciales en una reunión del Grupo Consultivo
del ECCD que dio como resultado 22 posibilidades. La recolección
de información y las discusiones subsiguientes redujeron el número
de posibles candidatos hasta identificar los 10 programas, incluyendo
el de Honduras, a través del apoyo del Fondo Cristiano de Niños
(ver tabla). Se cuenta con un Comité Consultivo formado por una
persona de enlace de cada equipo por país así como también
por algunas personalidades invitadas de las diferentes organizaciones
que participan en el estudio.
La Fundación cuenta con un
Coordinador de Proyecto, con amplia experiencia teórica y práctica,
y un Asistente, para el desarrollo y la administración del proyecto.
El Coordinador del Proyecto es el vínculo, se comunica y coordina
todo lo relacionado con las personas y los proyectos; revisa y analiza
los estudios de caso; controla la calidad de los diversos productos; y
redacta el volumen de la síntesis.
Cortes iniciales del estudio
Línea deTiempo. Para facilitar el sondeo del proceso, se crea una línea
de tiempo. Esto provee una manera de contar la historia del proyecto.
Dicha línea de tiempo comienza con el origen del proyecto, su génesis
y continúa hacia el presente.
Influencias.Este
sondeo consiste en una descripción de todas las cosas que han influenciado
en el proyecto. Por ejemplo, el contexto (el telón económico,
político y cultural) cuando el proyecto comienza; cómo cambió
el contexto a través del tiempo; y cómo aquéllos
comprometidos perciben que estos cambios han afectado el proyecto. El
sondeo de influencias describirá formas donde las elecciones personales
han afectado el proyecto. También presentará un cuadro de
los recursos (financieros y físicos) disponible durante la vida
del proyecto y lo que esto ha significado para el proyecto.
Actitudes/Posición.
Estos son los supuestos fundamentales, implícitos y explícitos,
del proyecto. Se intenta identificar las presunciones de aquellos que
están trabajando en el proyecto, tales como sus valores y creencias
acerca del desarrollo de los niños y la forma como aprenden los
adultos, las creencias acerca del valor de intervenir, y los tipos de
intervención apropiados, etc.
Proceso. Este ejercicio
de sondeo buscará "capturar" todos los procesos usados dentro de
los diferentes programas para tomar decisiones, dirigir problemas, vencer
obstáculos, etc. También incluirá información
sobre participación (quién participa, en qué momento,
y de qué formas).
Organización.
Dentro de este sondeo habrá un cuadro organizativo y una descripción
de la manera como ha cambiado a través del tiempo. También
habrá información acerca del liderazgo del proyecto (tanto
la naturaleza como el estilo), y cómo eso ha cambiado (o no) con
el transcurrir del tiempo; el aspecto cultural del programa y cómo
se crea; los procesos de selección, contratación y entrenamiento
del personal, etc.
Vínculos.
Se recopilará información sobre los tipos de vínculos
que se han formado con otras organizaciones, personas particulares, donantes,
gobiernos, etc., las redes de la que es parte la organización y
los roles que asume en esas redes.
Resultados. Esto
conducirá a la emisión de tipos de influencias que ha tenido
la organización (o está teniendo) sobre otros: los niños
y las familias comprendidas en el proyecto; el personal; la comunidad;
otras organizaciones y el contexto más amplio (como por ejemplo
la política de gobierno).
Sondeando el futuro.
Está claro que los proyectos tendrán una percepción
de los siguientes pasos para ellos como una organización. Se les
pedirá prever el futuro y describir cómo ven el desarrollo
del proyecto a través del tiempo. Esto nuevamente estará
en referencia con influencias, actitudes, proceso, organización,
vínculos y resultado.
Para poder trabajar con los mapas
conceptuales, se ha generado un juego inicial de preguntas que se usará
para ilustrar los tipos de información que pueden recopilarse en
relación a cada uno de estos sondeos.
evaluación
Los participantes de la iniciativa
se reúnen por lo menos una vez al año para hacer ajustes
y modificar los componentes del proyecto. Documentación de la Iniciativa
sobre efectividad se entrega en cada etapa, ya que el proceso de implantación
del proyecto crítico. Los miembros del Comité Consultivo,
como parte del proceso de seguimiento y evaluación, revisan la
documentación vigente y la comparten con sus respectivos equipos
y organizaciones. Los miembros del Comité Consultivo también
documentan su compromiso con la Iniciativa sobre efectividad, como
contribución considerablemente al proceso reflexivo.
resultados esperados
En su totalidad, la Iniciativa
sobre efectividad proveerá al campo de la infancia un mejor
entendimiento de lo que se necesita para crear proyectos eficaces en diferentes
lugares y contextos, utilizando diversas estrategias y aproximaciones
programáticas. La Iniciativa sobre efectividad también
producirá un entendimiento de los retos y escollos que necesitan
ser examinados, incluyendo un análisis de los costos y el financiamiento,
así como la identificación de interrogantes y sugerencias
que ayudarán a entender a los que tomen futuras decisiones qué
se necesita en un programa bien implantado que tiene un impacto positivo
en las vidas de los niños específicamente, la Iniciativa
sobre efectividad llevará a cabo/producirá:
un juego de estudios de caso completamente documentado,
incluyendo los sondeos varios y modelos que han surgido, escrito por
grupos investigadores locales y visitantes, que puedan servir como una
fuente de intercambio de conocimiento y experiencia;
un personal entrenado in situ que haya trabajado
en grupo con personalidades y agencias internacionales para comprender
cómo iniciar, llevar a cabo y evaluar un proyecto de desarrollo
de la infancia (ECD) en diferentes contextos;
un abanico de metodologías para conducir
estudios cualitativos;
publicaciones sobre metodología y proyectos
(manuales, CD-ROM, otros);
el desarrollo y articulación de un proceso
(o procesos) para trabajar en forma eficiente en sociedad y en diversos
lugares, con ONG, líderes locales en desarrollo del niño,
personal internacional de desarrollo, etc., de una manera entrelazada,
en el campo de la infancia;
documentación sobre proyectos seleccionados
(publicaciones, videos, CD-ROM y otras); y
una presentación/volumen de síntesis,
que junte lecciones aprendidas.
Riesgos
Muchos intentos para llegar a lecciones
generales en estudios comparativos han caído en uno o dos escollos.
Ya sea que son tan contextuales que terminan describiendo tales singulares
sistemas, o que son tan generales que uno podría haberlos registrado
antes del estudio. Esta Iniciativa no está interesada meramente
en evaluar el "conocimiento común", por lo que estamos enfatizando
la etapa de negociaciones: estamos permitiendo un período de seis
meses para asegurarnos de que estamos, realmente, interesados mutuamente
en las mismas preguntas "difíciles" y que nuestros objetivos sean
compatibles.
Esta es la razón por la cual
anticipamos algunos cambios en la lista de proyectos participantes. Necesitamos
hacer un balance entre no dictar la agenda de evaluación por un
lado, y asegurar que todos los comprometidos respeten el marco analítico
y los mecanismos que desarrollamos, por el otro. Todos los componentes
--Proyectos, Grupos, Sondeos, Perspectivas, Negociaciones-- y la interacción
entre ellos son igualmente significativos para el cumplimiento exitoso
de la Iniciativa sobre efectividad.
Nuestras plataformas para compartir
y aprender
Entre las herramientas más
valiosas que tenemos están las reuniones – de cara a cara; a menudo
talleres – se realizan periódicamente con miembros de los equipos
de cada equipo. Estas reuniones informan a los miembros de cada sitio
acerca de los procesos que cada uno atraviesa y permite compartir su aprendizaje.
Proporcionan también una plataforma para el intercambio de lecciones
aprendidas en los sitios individuales, acciones y desafíos, y a
planificar los siguientes objetivos de la iniciativa.
La primera reunión tomó
la forma de un taller en el junio 1999, en La Haya. Incluyó a miembros
de cada uno de los diez equipos. Allí, se aprendió más
acerca de las metas y propósitos de EI, y de lo que está
involucrado. Se compartió también lo que cada uno esperaba
hacer dentro de EI y lo que se anticipaba como resultado. Al final del
taller cada equipo detalló sus actividades específicas para
el resto del año.
La segunda reunión se realizó
en Guatemala con el apoyo de Redd Barna, con la participación de
los programas de América Latina (Perú, Colombia y Honduras).
Permitió una actualización de las actividades de EI dentro
en estos programas, compartir las herramientas usadas en cada sitios,
la experiencia de la acción hasta esa fecha, los planes para el
futuro, y definir la naturaleza de exposiciones a ser presentadas en la
Conferencia de EI, en noviembre 1999.
La Conferencia de EI fue sostenida
en La Haya con motivo de la celebración 50th del Aniversario de
la Fundación Bernard van Leer. La Conferencia permitió a
15 miembros de los 10 equipos del sitio de EI a exponer sus experiencias
a la fecha ante una audiencia cuidadosamente escogida: 25 personas con
poder de decisión y planificadores universitarios en el área
de la infancia, actores de las bases, y personalidades de agencias de
financiamiento y gobiernos.
Durante este año se han realizado
dos encuentros: en mayo, un taller internacional en Porto y en octubre,
un encuentro de consulta en La Haya. El primero fue una oportunidad para
todos los equipos de sitio para compartir ideas acerca de sus experiencias
en el uso de herramientas y métodos cualitativos para reunir y
analizar datos; compartir diferente formas creadoras de comunicación,
para presentar sus hallazgos efectivamente a las diferentes audiencias
- objetivo; y desarrollar modos concretos de aplicación de estos
aprendizajes en programas de infancia. El segundo, reunió a un
equipo más reducido de participantes con el fin de redondear los
productos colectivos e individuales poe país y dar un nuevo giro
a la iniciativa con un enfoque más descentralizado de la dirección
global del proyecto.
Entre los diversos medios de diseminación
de la iniciativa de efectividad, contamos con un número al año
de Early Childhood Matters. La edición de octubre presenta artículos
acerca de varios aspectos de los 18 meses de vida que ha tenido la iniciativa.
Se provee una visión global de lo que se ha experimentado y logrado
hasta ahora; un análisis y reflexión sobre las dinámicas,
inquietudes y resultados iniciales del proceso; así como las principales
herramientas empleadas en la facilitación del proceso. Debido al
interés de la comunidad hispanohablante internacional por esta
iniciativa, se publicará un número especial de Espacio para
la Infancia con estos contenidos en lengua Castellana.
Puesto que EI fue concebido como un
espacio abierto para explorar y documentar en forma creativa y transparente
los procesos, las fuentes y los resultados de la programación en
el área de la infancia, esperamos cometer errores, recibir sorpresas
y aceptar cambios de dirección en la medida en que la iniciativa
se desenvuelve.
Una mirada al proceso
Nada es permanente, solamente el cambio
Heraclitus
Indagar qué hace que un programa
de infancia (ECD) funcione, desde la mayor variedad de ópticas
posibles, ha sido la única pauta preestablecida, desde el comienzo,
en la Iniciativa de Efectividad, aparte de las restricciones impuestas
por los aspectos administrativos.
Los desarrollos posteriores de EI
en cada país, y en su totalidad, son un producto del juego de consensos
y tensiones entre las diferentes visiones e intereses de los participantes
involucrados, de sus contextos culturales y profesionales, y de la negociación
de términos con las contrapartes locales (comunitarias e institucionales)
y con el equipo de coordinación central (CT). Si bien, por razones
obvias, el equipo central juega un papel importante en la coordinación
de los encuentros; la orientación general de la iniciativa muestra
el peso que tiene la dinámica resultante del encuentro entre la
disparidad de iniciativas individuales y grupales, por un lado, y el proceso
de auto-organización de la "comunidad o familia EI", por el otro.
Esta dinámica presenta riesgos
y oportunidades. Por un lado, la tendencia a auto-organizarse de la comunidad,
permite agilizar procesos de comunicación y cooperación
en la identificación de contenidos relevantes al estudio. A la
vez, la creación de una comunidad podría llevar a la conformación
de un circuito cerrado, con un lenguaje común, donde sólo
los iniciados tienen algo que aportar y se resiente la incorporación
de nuevos actores. Por el otro, la unicidad de cada programa dentro de
su contexto, muestra una clara presencia del caso especial: cada programa
es un caso especial dentro del estudio y cualquier intento de agrupamiento
debe sacrificar muchos contenidos de relevancia, muchas fuentes de información.
El taller de Porto reflejó
esta dinámica. Por un lado se tuvo la sensación de que la
convivencia en este espacio de trabajo consolidó a los participantes
como una gran familia. Sensación que se reflejó en los deseos
expresos de mantener, dentro de lo posible, un bajo nivel de rotación
de los miembros de EI, de promover mayores oportunidades de intercambio
entre los equipos de trabajo y, en algunos casos, de resistir la incorporación
de agentes externos a la comunidad. La conformación de grupos de
trabajo se perfila como un paso en la vía de aprovechar la capacidad
existente dentro de dicha comunidad. La coordinación y apoyo de
esta iniciativa apuntan hacia la consolidación de los intercambios
entre los miembros de dichos grupos inter-equipos. Cada grupo es responsable
de establecer sus propias reglas y de jerarquizar sus prioridades. La
búsqueda de intercambio dentro de los límites de EI muestra
la relevancia de ciertos contenidos para estos actores conformados en
círculos de intercambio y aprendizaje.
Por otro lado, las divergencias entre
las aspiraciones de cada equipo, en cuanto a las necesidades sentidas
con respecto al apoyo y el role de estos espacios de encuentro y el papel
del equipo de coordinación (CT – Coordination Team), demuestra,
desde nuestra perspectiva, una sana presión hacia la conservación
de la riqueza de cada caso, en contraposición a una presión
hacia el consenso y la síntesis del estudio en un producto final
unificador.
Cada uno de los procesos involucrados
en EI ha mostrado la fuerza de la diversidad y la flexibilidad del equipo
central para aceptarla y avanzar un paso más hacia su comprensión,
reorientando su propia fisonomía como equipo de trabajo. Aquí,
las propuestas de diseminación deberían mostrar cómo
cada equipo plantea la participación de los diferentes participantes
y personas vinculadas o afectadas por el programa, qué información,
materiales o aprendizajes son considerados pertinentes y cuáles
las mejores vías de ponerlos a su disposición. Si todas
son diferentes, algo salió bien.
Los esquemas iniciales de conformación
de equipos para garantizar las perspectivas Etic y Emic del estudio son
otro ejemplo de cómo la dinámica de EI se ha desarrollado
de forma imprevista. Son tan variadas que no es posible establecer un
patrón que unifique la metodología seguida. Quién
es "insider" (observador interno) y quién "outsider" (observador
externo), en un programa particular, no era una decisión que pudiera
ser prevista, en sus últimos detalles, desde el primer día.
Así pues, cada equipo ha desarrollado una dinámica propia,
en la que las decisiones y preferencias nacidas del seno de los programas,
de las instituciones que lo administran o estudian, o del equipo coordinador
(CT), representan un universo caótico de posibles variantes de
equipos de trabajo.
Aún cuando se trate de hacer
un esfuerzo por describir las pautas metodológicas de EI, la confluencia
de estos factores no previstos en la conformación de dichos equipos,
y de sus esquemas de trabajo, hacen imposible ir más allá
de los acuerdos de tomar tantas perspectivas de participantes e interesados
como sea posible, dentro de los límites impuestos por los recursos
disponibles, y que se garantice a las comunidades y organizaciones participantes
que la información y material recabado no sea el resultado de una
mera extracción de conocimientos, sino una fuente de recursos para
uso directo en el mejoramiento del programa. Por ejemplo, el carácter
cooperativo del movimiento de Agueda obliga a incorporar en el estudio
a más de las dos personas que en principio serían los observadores
internos (insiders). Para resolver el problema de la limitación
a dos miembros en los encuentros, decidieron mantener a un miembro fija
y otro miembro rotativo, para ir dando oportunidad a todos de participar.
En SEWA (India), asistir a cada evento en el extranjero es una recompensa
que reciben los miembros activos del sindicato. Por lo tanto, fuera de
la Directora ejecutiva, resulta muy difícil mantener a un miembro
estable de este programa indio en los encuentros de EI. Así, cada
equipo muestra una historia diferente en cuanto a sus miembros internos
(insiders) y una forma muy específica de garantizar la participación
de sus actores locales.
El carácter de observador interno
se relativiza aún más cuando lo examinamos con más
detalle. Cuando la organización no conduce el programa mismo, como
es el caso de Perú y Colombia, o cuando el programa está
descentralizado, como en los casos de los Países Bajos y Mozambique,
estos observadores no necesariamente tienen experiencia como ejecutores
del programa. En ese sentido, son también externos al programa.
El equipo de investigación en esos sitios carga con la gran responsabilidad
de presentar fielmente las voces de los verdaderos participantes, acudiendo
a ellos para garantizar la exactitud de las interpretaciones de los datos
relevantes.
La diversidad de los programas es
la principal riqueza de la iniciativa. Los contextos históricos,
y socio-culturales en los que se desenvuelven, develan factores fortuitos
o accidentales, que muchas veces resultan de acciones planificadas para
otros fines. Los aspectos mejor documentados de cada programa usualmente
responden a aquellos relacionados con la programación; con lo que
se quería hacer y sus resultados. Es un tanto más complejo
el abordaje de aquellos aspectos coyunturales que no estaban inscritos
en el plan inicial. Estos aspectos pueden ser el resultado de una respuesta
orgánica a una situación imprevista, pueden ser el resultado
accidental de una decisión o acción emergente, no estipulada
en ningún manual de procedimientos, o podrían obedecer a
una tendencia natural de la organización social.
En el primer caso, las respuestas
orgánicas suelen estar inscritas en manuales de procedimientos
o están contempladas en los programas de capacitación. Si
bien el Huracán Mitch, permitió ver la solidez del programa
en una situación de gran adversidad, la respuesta de las Madres
Guías estaba contemplada en los planes de CCFH y en sus programas
de capacitación. El resultado observado es una comprobación
de que el programa se pone en marcha en una situación de crisis
y da respuestas adecuadas.
En el segundo caso, quizás
el más difícil de recoger, se trata de acciones improvisadas
donde la claridad, intuición, conocimiento o experiencia de un
actor define un curso de acciones que con frecuencia no son registradas
en libro alguno. Aparecen como anécdotas, y con frecuencia no existe
el "formato" institucional para reportarlas. La resistencia del gobierno
al programa promesa disminuyó notablemente gracias al testimonio
no planificado que un alto funcionario tuvo, durante una visita no planificada.
El observar a un poblador utilizar un microscopio con maestría
y hacer un diagnóstico con precisión, no fue producto de
un plan. La acción en sí del sujeto responde al primer caso,
puesto que fue capacitado para hacerlo, pero la demostración ante
el funcionario, el hecho "promocional", fue una improvisación,
¿con sentido de oportunidad o una mera acción involuntaria? Sin
conocer la anécdota del propio sujeto, no podríamos más
que recoger la versión del visitante, desde su óptica, que
la señala como casual.
El tercer caso plantea una situación
más conocida de la teoría social que añade una evidencia
a lo ya conocido o aporta un elemento nuevo para cotejar e indagar más.
Mientras la gran mayoría de programas de infancia en Latinoamérica
y Europa cuenta con mujeres en calidad de cuidadoras de niños,
el PRONOEI de Perú, durante sus primeros años, contaba con
un contingente mayoritario de hombres en el role de animadores (cuidadores
de niños pequeños). El prestigio social que tenía
este trabajo en Puno alentaba a los jóvenes a asumirlo, mientras
que sus vecinos atendían su chacra (sus tierras). Una vez que se
instituyó un modesto pago para el desempeño de este role,
los vecinos dejaron de trabajarles su chacra, por lo que los hombres se
han ido retirando masivamente. En su lugar, mujeres necesitando este modesto
ingreso se rotan el role de animadoras cada dos o tres años con
el fin de dar a todas una oportunidad de ingresos en estas comunidades
empobrecidas.
Los contrastes entre estas experiencias,
así como las preocupaciones comunes se manifiestan con todos sus
matices en los espacios de encuentro generados por la iniciativa sobre
efectividad. Los intercambios y anécdotas, las discusiones y negociaciones
entre los equipos entre sí y con el CT, determinan no sólo
el curso del proceso como proyecto global, sino que reorientan las acciones
de cada equipo individual en la planificación de acciones en el
estudio del programa específico y la forma de documentar sus hallazgos.
Aún estamos en proceso de aprendizaje y es necesario aprender de
nuestra propia capacidad para aprender y flexibilidad para acomodar cambios.
El encuentro de Porto sirvió
para remarcar la importancia de estos espacios para compartir. La búsqueda
de vías innovadoras de aproximación a la acción social
en el campo de la infancia, requiere de momentos de reflexión compartida.
La búsqueda de consensos sobre lo que resulta relevante en el éxito
de programas de infancia cede terreno a la necesidad de identificar principios
éticos y metodológicos comunes en el estudio de estos programas
y de las lecciones que han producido a lo largo de sus años de
ejecución, en sus diferentes contextos y para sus diferentes actores
e interesados.
Durante la semana del encuentro de
Porto, se pusieron a prueba nuestras visiones sobre el proceso de aprendizaje
que hemos llamado Iniciativa sobre Efectividad (EI). Desde el punto de
vista ético, se planteó la importancia de dar acceso real
a los actores e interesados de cada programa a exponer su perspectiva
sobre lo que hacía que estos funcionaran tal como lo hacen.
Si bien la participación resulta
un principio unificador de los diferentes equipos de EI, la forma de llevarlo
a cabo presenta una gran diversidad. Diversidad que se explica a su vez,
por diferentes factores intervinientes. Algunos equipos hicieron un esfuerzo
grande por desarrollar instrumentos de participación infantil.
Para ello, emplearon instrumentos locales con alguna connotación
cultural (la aspillera peruana, la pesca en Honduras, los juguetes en
la India, el teatro comunitario en Colombia). La aplicación de
los mismos permite recoger información desde la comunidad. Otros
se esmeraron en involucrar a los padres en la planificación del
estudio o en la realización de actividades de exploración
de las lecciones aprendidas (India, Filipinas, Israel y Portugal).
Las entrevistas siguen siendo la herramienta
de más fácil acceso para obtener información en corto
tiempo de personajes vinculados de algún modo y en alguna época
a los programas. El encuentro de Octubre, sin embargo, nos mostró
las complejidades de la entrevista como herramienta de exploración
cualitativa y la necesidad de complementarla con otras técnicas
y herramientas.
En la exposición de estos instrumentos,
se planteó hasta qué punto la participación de algunos
entrevistados o participantes reflejaba claramente sus visiones del programa
y hasta dónde podrían estar sus opiniones mediatizadas por
las características mismas de los instrumentos empleados.
Además, nos podríamos
preguntar si la participación de los diferentes estratos de actores
es una consideración meramente ética o si se está
abordando un principio metodológico. El equipo de Portugal y, en
su momento, los equipos de Mozambique y Honduras habían planteado
anteriormente cuál sería el beneficio concreto que aportaría
EI a sus respectivos programas.
La dimensión de la utilidad
práctica de la investigación aparece así como otro
elemento interesante a considerar dentro del espacio abierto EI. No hay
investigados e investigadores, sino que los investigados son a la vez
investigadores. La validez de la información recabada es relativa
a quien la produce y la usa para mejorar la "efectividad" de su programa
o de las acciones que le son encomendadas. De allí que algunos
equipos planteasen la importancia de integrar las acciones de EI a los
planes programáticos de las organizaciones involucradas. Si EI
no arroja resultados importantes para los programas, la validez de las
lecciones aprendidas serían de muy dudosa solidez.
De este modo, comunidades desgastadas
por el abusivo uso de la investigación sin "beneficios" aparentes,
tendrían que estar mejor informadas del significado de EI y encontrar
sus propios beneficios directos para participar en él. Entre los
participantes de EI, la iniciativa no es concebida meramente como un proyecto
de aprendizaje sobre lo que funciona en los programas, sino que es vista
como una vía para hacer más efectivos los programas. Allí
podríamos pues identificar un principio ético y metodológico
compartido. Este principio de la investigación inclusiva no afecta
la capacidad de los equipos para ensayar instrumentos novedosos o tradicionales
en la búsqueda de voces acerca de las lecciones de los programas,
pero condiciona lo que se espera en términos de participación
dentro de un esquema de transparencia y respeto por cada uno de los actores
involucrados en la iniciativa.
Los encuentros de Porto y La Haya
facilitaron que los contactos entre equipos se hicieran más frecuentes.
La mayoría de quienes enviaron sus evaluaciones coinciden en que
el espacio de los encuentros es una gran oportunidad para reunirse como
equipos de trabajo, con la presencia del CT como interlocutor para canalizar
interrogantes y explorar posibilidades de acción futura. Así,
el contacto entre los equipos locales y el CT es valorado como una necesidad
del proyecto, en general.
Obviamente, este contacto debe ser
parte esencial de nuevos encuentros en el que la planificación
se alimente de necesidades locales y, a la vez, logre conservar la búsqueda
de comprensión de los aprendizajes en el ámbito local. Esto
es mantener y fortalecer los contactos de la "comunidad o familia EI",
sin perder el valor que tiene el estudio de caso como campo fundamental
para el aprendizaje de lo que funciona en programas para infancia. Por
esta razón, el equipo coordinador plantea la necesidad de desarrollar
nuevas consultorías puntuales, en los cuales se espera redondear
los aprendizajes obtenidos en el marco de la EI.
El encuentro de octubre se centró
en recoger la metodología, la ética de investigación
inclusiva y pertinente, en oposición a la investigación
extractiva, que no deja beneficios claros y directos a quien produce la
información. De este modo, se busca armonizar la necesidad de información
de las organizaciones promotoras de la iniciativa y capitalizar sobre
el conocimiento acerca de cómo una práctica de aprendizaje
puede ser sustentada sobre principios éticos de respeto e inclusión
de los diferentes estratos de participación en un programa. Los
hallazgos y temas que comienzan a salir del estudio, sirvieron como plataforma
para comprender la forma de obtenerlos. Los próximos encuentros
puntuales permitirán ahondar más en tales contenidos temáticos.
Algunas observaciones iniciales
¿Existe la vida más allá
de los puntajes?
Muy pertinente a una iniciativa de
esta naturaleza es la colección de las lecciones y reflexiones
que comienzan a aparecer durante las visitas de campo, los encuentros
internacionales, las reuniones de equipo y los informes preliminares de
resultados. Aunque, estas observaciones iniciales hayan aparecido apenas
en acontecimientos muy puntuales durante el proceso, ellos comienzan a
actuar como la chispa que provoca debates locales e inter-equipos y a
promover mayor búsqueda de información entre los participantes.
Si bien temas generales vinculadas
a los proyectos suelen captar la atención con más facilidad,
ciertas observaciones en el campo donde se desenvuelven las acciones,
permite una mirada fresca a asuntos que parecen muy conocidos, por quienes
manejan la cooperación, pero aún no están explícitamente
resueltos para quienes enfrentan la realidad de los programas día
a día. Los temas generales de sostenibilidad, efectividad, construcción
de capacidades se pueden ver enriquecidos con una mirada a las inquietudes
que surgen de los participantes de los programas. Unos ejemplos de estas
inquietudes se reseñan a continuación.
Un espacio para la reflexión. Una de las
principales lecciones que está emergiendo de los diferentes equipos
es que EI abrió espacios para aprender. Si bien la construcción
de redes (networking) se contempla en muchos proyectos actuales, estos
equipos comienzan a compartir una visión interna acerca la naturaleza
de tales redes. Uno de los principales retos del intercambio técnico
ente organizaciones dedicadas a la infancia es el poco tiempo asignado
en sus propios planes para sistematizar y documentar sus aprendizajes
y reflexiones sobre la acción. EI ha posibilitado un encuentro
planificado entre actores y autores que permite extraer contenidos relevantes
desde el punto de vista de la práctica y diseminarlo en un lenguaje
de amplio acceso entre personas e instituciones interesadas en la programación
para la infancia. Los programas de infancia deberían contar con
apoyo para documentar, reflexionar y compartir con sus pares y otros
interesados, sus aprendizajes.
La rotación del personal paraprofesional.
Mientras en una empresa, la inestabilidad del personal es un problema
indeseable, en los programas de infancia éste fenómeno
parece ser una realidad cotidiana. En cierto modo, podría hasta
traer algunas ventajas. Puesto que este personal pertenece a la comunidad,
su participación en el entrenamiento tiene un efecto directo
sobre la nueva generación de madres y padres. La capacitación
permanente debería ser incluida en los convenios de financiamiento
y cooperación de los programas de infancia.
La rotación de los líderes es otra
historia. Cuándo comparamos la línea del tiempo de un
proyecto con un río, los cambios de líderes aparecen como
puntos críticos o "accidentes" en su curso. Los cambios en el
liderazgo son usualmente referidos como eventos clave dentro de la vida
de un proyecto por la mayoría de sus actores. La experiencia
en Kenya en el establecimiento de un proceso de sucesión planificada
podría darnos luces acerca de cómo podríamos abordar
esta problemática sin poner en riesgo el desarrollo de los programas
de infancia.
Otro aspecto que contribuye a perfilar los programas
y sus organizaciones es la forma como se maneja el conflicto internamente.
En la iniciativa sobre efectividad participan organizaciones que basan
su actividad en el consenso y dedican grandes esfuerzos para lograrlo,
organizaciones que definen la disidencia como desviaciones del programa
y la sancionan, y organizaciones que acomodan los conflictos internamente
como fuente de crecimiento. Información sobre este aspecto aparece
en las observaciones y anécdotas de ex-funcionarios y ex-participantes
de los programas. Su valor como indicador de fortaleza debe aun ser
cotejado con otros aspectos contextuales de los países donde
se reporta.
Consultar a los niños no sólo medirlos.
Una de las estrategias emergentes es la consulta a los niños.
Tradicionalmente, los programas de infancia aplican medidas de desarrollo
o de rendimiento como base para estimar el impacto de sus acciones en
población infantil atendida. A modo de cambio, los equipos de
Perú y Honduras exploran herramientas basadas en el contexto
local para obtener las opiniones y sentimientos de niños y niñas
acerca de su participación en los programas de infancia. Se tiene
la expectativa de conocer las posibilidades prácticas de extender
los derechos internacionales del niño a una población
más joven.
El empoderamiento (empowerment) de la mujer y la
problemática del trabajo paraprofesional debe ser abordado desde
una perspectiva cultural. Si bien se conoce y se explota la capacidad
de la mujer como instrumento social para favorecer a la infancia, algunos
aspectos de esta política deben ser reevaluados en diferentes
contextos. La retribución económica de su trabajo, el
impacto que tienen sobre la familia los programas dirigidos a la mujer
que excluyen a los padres y el aporte de las niñas al cuidado
de sus hermanos menores dentro y fuera del contexto programático
comienzan a emerger como asuntos que ameritan mayor comprensión.
El mejor recurso de un programa es una persona
con recursos. Durante los momentos de crisis de los programas, siempre
aparece una persona capaz de habilitar las condiciones y objetos del
entorno para inyectarles nuevo entusiasmo y fuerza. Estas personas y
no los recursos circunstanciales juegan un papel primordial en el progreso
de los programas en los diferentes niveles de la acción (padres,
para-profesionales o líderes de las ONG. La comprensión
del aporte de estas personas y la forma en que se desarrolla su carrera
y su actitud hacia la tarea son elementos necesarios en el diseño
de programas de capacitación.
La alfabetización como proceso de concientización
y liberación ya ha sido propuesta y probado en el campo por Paulo
Freire y sus seguidores a través del mundo. Su uso como estrategia
de investigación-acción en el proyecto Monte Pinatubo
de Filipinas y SEWA India, tiende un puente entre esta área y
la acción holística entorno al niño y su nicho
de desarrollo. En Filipinas, el uso de diarios de familia, en los que
el material escrito, fotográfico y las ilustraciones de diferentes
miembros de una familia sirven para reconstruir su historia, definir
sus expectativas y planificar el futuro juega un papel decisivo en la
construcción de nociones de pertenencia social en familias afectadas
por el volcán. La reconstrucción de la temporalidad en
la identificación y rescate de sus raíces culturales,
ayuda a las familias y a las organizaciones que les dan apoyo a apropiarse
de su futuro y a actuar de modo decisivo en su diseño. La acción
alfabetizadora de estas actividades es un medio y no un fin en el fortalecimiento
de estas comunidades
A modo de cierre
Aunque el material producido por los
participantes de los programas, como consecuencia de su involucramiento
en la investigación, no ha añadido hasta ahora nuevo conocimiento
a las agencias de cooperación, muestra la necesidad de hacer explícito
y transparente este conocimiento y a reflexionar sobre las implicaciones
programáticas entre aquéllos que la hacen posible. Tienen
consecuencias directas en la forma de planificar, si se ha de incidir
en la sostenibilidad y efectividad de los programas.
La Iniciativa sobre Efectividad es
sin embargo un proceso abierto y apenas en estos momentos comienza a profundizar
en los temas identificados por los diferentes equipos. A partir de este
momento, se fortalecerá la propuesta de diseminación de
aprendizaje, desde cada uno de los sitios y hacia audiencias más
amplias de la programación para la infancia. La habilitación
de recursos tecnológicos de información y la descentralización
de la conducción de las actividades de la Iniciativa, serán
la nueva plataforma para compartir los hallazgos salientes.
Ir más allá de los indicadores
cuantitativos del éxito programático de los proyectos locales
de infancia, abre para nosotros una dimensión interesante en la
comprensión del colorido y de los matices que cada cultura aporta
en la ejecución de sus planes, en la identificación y documentación
de las lecciones extraídas y en la apertura la pluralidad de percepciones
que se tiene sobre la infancia, la familia y en los entornos en los que
prosperan.