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               | 
               
                 Organización 
                  de Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la 
                  Cultura 
                  Unidad de Primera Infancia y Educación Familiar 
               | 
               
                
                
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                Nº 2/ abril 2002. Planificación 
                del acceso: Lo primero es desarrollar un sistema de datos. | 
             
             
               Pregunte a las autoridades 
                de un ministerio de educación de un país en desarrollo cómo han 
                planificado mejorar el acceso a los servicios de la primera infancia. 
                Lo más probable es que señalen los esfuerzos orientados a estimular 
                las tasas de ingreso a la educación preprimaria(1) de los niños mayores de 
                tres años, la creación de más kindergardens, jardi nes infantiles y establecimientos 
                de este tipo. 
                 
                Es cierto que muchos ministerios 
                de educación están conscientes de las dificultades que implica 
                llegar incluso a los niños mayores a través del sistema formal 
                y actualmente se encuentran explorando alternativas no formales(2). También se están desarrollando 
                planes pa ra niños menores de tres 
                años. No obstante, con relación al acceso, la mayor parte de las 
                políticas sobre la primera infancia, al menos en términos de prioridades 
                de inversión, se concentra en la expansión de la educación preprimaria 
                para niños mayores de tres años.(3) 
                 
                En algunos países, el mandato 
                del ministerio de educación de la Primera Infancia(4) aún se encuentra limitado 
                a la educación preprimaria. En este caso, la adhesión a la educación 
                preprimaria sería una cuestión de principios. En otros, donde 
                el mandato ha sido ampliado para incluir a otros grupos etarios 
                y programas no formales, la política sería un reflejo de una consciente 
                priorización de las inversiones del ministerio en beneficio de 
                la educación preprimaria. 
                 
                Ambos casos señalan la 
                falta de voluntad política como una de las causas de la dirección 
                que ha tomado la política. Sin embargo, la experiencia del Ministerio 
                de Educación brasileño sugiere que el problema puede residir no 
                tanto en la falta de voluntad para desarrollar una política más 
                amplia, sino, entre otras cosas, en los limitados sistemas de 
                datos(5) con que cuentan los ministerios 
                para extender el alcance de la Primera Infancia más allá de la 
                educación preprimaria. 
                 
                 
                
                   
                   
                    (1) En este artículo, 
                      educación preprimaria se define como un programa educacional 
                      para niños mayores de tres años (en algunos casos, dos años) 
                      basado en un centro o escuela, según la definición contenida 
                      en la Clasificación Internacional Estándar de Educación 
                      Preprimaria o ISCED - 0.  
                      (2) Por ejemplo, en Cuba, el Ministerio 
                      de Educación cuenta con un sistema integrado para niños 
                      entre 0 y 6 años de edad, que incluye programas comunitarios 
                      de educación para niños menores de tres años, organizados 
                      por los padres. 
                      (3) El problema de acceso de niños 
                      menores de tres años, también se plantea en países desarrollados, 
                      con la importante excepción de algunos países nórdicos que 
                      han extendido el derecho a un lugar a niños de este grupo 
                      etario. 
                      (4) La expresión Primera 
                      Infancia se escribe con mayúsculas para marcar la diferencia 
                      entre ésta como disciplina y área profesional y la primera 
                      infancia referida al período inicial del ciclo de vida de 
                      una persona.  
                      (5) Se incluyen datos cualitativos 
                      y cuantitativos. | 
                   
                   
                 
                El año 1996 en Brasil, 
                los auspicios ministeriales para guarderías de niños (para niños 
                entre 0 y 3 años de edad) y jardines infantiles (para niños entre 
                4 y 6 años de edad) fueron integrados bajo el Ministerio de Educación(6) . Uno de los primeros pasos 
                en la implementación de este mandato más amplio fue la recolección 
                de datos acerca de estos servicios. En 1997, el censo escolar 
                anual del ministerio incluía información sobre unas pocas guarderías 
                vinculadas con escuelas. El 2000, el ministerio realizó una encuesta 
                nacional para recolectar datos básicos sobre educación de la primera 
                infancia, el primer estudio de este tipo realizado por dicho ministerio. 
                Un hecho significativo es que la encuesta cubrió no sólo los jardines 
                infantiles sino también las guarderías que atienden a niños menores 
                de tres años. 
                 
                No fue posible completar 
                la información sobre las guarderías debido a que la encuesta no 
                pudo identificar el número total de estas instituciones en todo 
                el país. Con todo, la información básica parcial ayudó al ministerio 
                a incluir a todo el grupo entre 0 y 6 años de edad y a los servicios 
                correspondientes, dentro del área de planificación de política. 
                El ministerio reconoció que la información jugó un papel importante 
                en este proceso. 
                 
                Quizás lo más importante 
                es que antes de realizar la encuesta el ministerio revisó las 
                normas legales de cada institución involucrada con la primera 
                infancia, hecho que ayudó a registrar y a acreditar las guarderías, 
                así como otros servicios, que hasta entonces habían estado fuera 
                de la esfera de la administración gubernamental. Gracias a este 
                ejercicio, las guarderías ahora podrían ser encuestadas y eventualmente 
                incluidas dentro del área de competencia de la política nacional 
                para la Primera Infancia del ministerio. 
                 
                La experiencia brasileña 
                puede no ser única en este sentido aunque ilustra dos puntos importantes. 
                 
                 
                
                   
                   
                    (6) De hecho, en 1988 
                      la Constitución Federal declara que la educación de la primera 
                      infancia representa el derecho de todo niño y que su provisión 
                      es deber del Estado y de la familia y bajo el Capítulo de 
                      Educación se mencionan tanto las guarderías de niños, que 
                      estaban bajo la dirección del Ministerio de Asuntos Sociales, 
                      como los jardines infantiles. Sin embargo, la responsabilidad 
                      por ambos servicios fue asignada al Ministerio de Educación, 
                      sólo con la introducción de la Ley de Directrices y Bases 
                      de Educación Nacional (Ley 9394), o Lei de Diretrizes e 
                      Bases da Educaçao Nacional - LDB en 1996. Es importante 
                      destacar que la responsabilidad por proveer servicios para 
                      la primera infancia reside en las municipalidades. 
                      (7) Incluso antes de la encuesta que 
                      tuviera lugar el 2000, el ministerio ya había impulsado 
                      algunas iniciativas a favor de las guarderías de niños. 
                      Por ejemplo, había elaborado pautas curriculares, de acreditación, 
                      operación y capacitación para los servicios de la primera 
                      infancia que incluían a las guarderías de niños. Sin embargo, 
                      en términos de acceso o financiamiento de guarderías de 
                      niños, ninguna planificación de política de carácter significativo 
                      había sido lanzada antes de la encuesta.  | 
                   
                   
                 
                 Primero, antes de iniciar 
                el desarrollo de políticas, el ministerio buscó elaborar un conjunto 
                global de datos que cubriera el grupo comprendido entre los 0 
                y 6 años de edad. Interesantemente, fue una de las primeras tareas 
                que realizó una vez recibido el mandato ampliado.(7) Segundo, puso énfasis 
                en el desarrollo de sistemas para la identificación y el reconocimiento 
                de guarderías de niños antes de iniciar la recolección de datos 
                asociados con ellas. 
                 
                Esta priorización de la 
                política es destacable, puesto que es mucho más frecuente que 
                las políticas para la primera infancia sean desarrolladas sin 
                el apoyo de datos sólidos. Esto no significa que la necesidad 
                de contar con servicios para la primera infancia no pueda ser 
                percibida sin la ayuda de información. En algunos países, la necesidad 
                es demasiado obvia como para ignorarla, incluso si no se dispone 
                de información que la certifique. Sin embargo, estar conscientes 
                de la existencia de las necesidades que deben ser abordadas es 
                una cosa, abordar esas necesidades con acciones concretas es otra 
                muy distinta. Esta última requiere concientización política seguida 
                por un discurso de políticas específicas, planificación y un compromiso 
                financiero, para lo cual la obtención de una herramienta de política 
                tan esencial como es la información se convierte en algo fundamental. 
                 
                Si bien los elaboradores de política pueden atribuir la misma 
                importancia a la información y al desarrollo de políticas, es 
                posible que subestimen la importancia de la primera como requisito 
                previo a dicho desarrollo. Asimismo, con relación al desarrollo 
                de información sobre la Primera Infancia, típicamente se ha puesto 
                énfasis en la confiabilidad y validez de la información o en el 
                desarrollo de indicadores y se ha prestado poca atención a la 
                elaboración de un sistema capaz de identificar, reconocer y apoyar 
                los servicios prestados - incluyendo aquellos ofrecidos a nivel 
                popular - desde un punto de vista administrativo. En el caso de 
                Brasil, el valor de la información como herramienta y la necesidad 
                de mejorar la infraestructura básica del sistema de recolección 
                de datos, tal como el registro de servicios, han sido ampliamente 
                reconocidos. 
                 
                Si, en el caso de Brasil, este sistema de información mejorado 
                lleva eventualmente a un plan de política global sobre acceso, 
                es algo que está por verse. En general, la pregunta depende de 
                muchos otros factores tales como la disponibilidad de una cantidad 
                suficiente de recursos. Por ejemplo, para alentar a los servicios 
                no oficiales a registrarse, es posible que deba crearse algún 
                incentivo (por ejemplo, alivio tributario, apoyo, oportunidades 
                de capacitación y reconocimiento). Para promover un enfoque integral 
                de la Primera Infancia, los ministerios también necesitarán desarrollar 
                sistemas igualmente integrados en las áreas de financiamiento, 
                currículo, capacitación y prestación de servicios. De hecho, estudios 
                recientes de la UNESCO (8) muestran que lo crucial, 
                aunque difícil de lograr en términos de establecer un sistema 
                integrado para la primera infancia, es el desarrollo de un currículo 
                y de un sistema de capacitación integrados, para todo tipo de 
                educadores. Quizás lo más importante es que no sería posible establecer 
                un sistema integrado sin la necesaria coordinación con otros ministerios. 
                 
                 
                
                   
                   
                    | (8) Podmore, V. Y Meade, 
                      A. (abril). Early childhood education policy co-ordination 
                      under the auspices of the Department/Ministry of Education: 
                      A case study of New Zealand. UNESCO Early Childhood and 
                      Family Policy Series, Number 1. / Taguchi, H y Munkhammar, 
                      I. (Próximamente). An integrated early childhood policy 
                      system: The case study of Sweden. UNESCO Early Childhood 
                      and Family Policy Series, Number 2. / Rayna, S. (Próximamente) 
                      La mise en ouvre de la politique integrée de la petite enfance 
                      au Sénégal. UNESCO Early Childhood and Family Policy Series, 
                      Number 5. | 
                   
                   
                 
                 Sin embargo, en el caso 
                de Brasil este enfoque parece haber dado resultados en la medida 
                que el ministerio buscó proyectar la Primera Infancia más allá 
                de la educación preprimaria e incorporó a los servicios y grupos 
                etarios que no estaban bajo su responsabilidad al discurso de 
                políticas de la Primera Infancia. Y, esta tarea de traer la realidad 
                que necesita la atención de las políticas a la arena del discurso 
                público es el primer paso, y quizás uno de los más importantes, 
                hacia la creación de un sistema integrado de la Primera Infancia. 
                 
                 
                
                   
                   
                    | (9) Se ha criticado 
                      el hecho que la política no toma en cuenta a los niños menores 
                      de tres años y a los niños desfavorecidos. También se ha 
                      criticado el descuido mostrado por la política en temas 
                      relacionados con el cuidado durante el desarrollo del niño 
                      (por ejemplo, salud y nutrición) y la educación de los padres, 
                      aspectos que deberían ser una parte integral de las políticas 
                      de la primera infancia y un medio estratégico de ampliar 
                      el acceso a un entorno de la primera infancia de calidad 
                      en el hogar. También conviene destacar que la política se 
                      centra en la disponibilidad de servicios, aún cuando la 
                      disponibilidad es sólo una dimensión del acceso. Los nuevos 
                      servicios también debieran ser accesibles - estar dentro 
                      del alcance práctico de los niños beneficiarios y de sus 
                      padres y, lo que es más importante, tener un costo accesible. 
                      Asimismo, deberían haber servicios para niños con necesidades 
                      especiales y para todos los grupos etarios.  | 
                   
                   
                 
                 
                  Los gobiernos, los profesionales 
                    y los organismos de desarrollo han intentado abordar el problema 
                    de las políticas para la Primera Infancia de los ministerios 
                    de educación (9) buscando las mejores formas 
                    de invertir los limitados recursos públicos disponibles para 
                    esta área. Se han citado investigaciones sobre el cerebro 
                    que avalan la importancia que los niños de cortos años tengan 
                    acceso al cuidado y a la educación desde sus primeros años 
                    de vida. También se ha hecho referencia a las campañas globales 
                    de Educación para Todos y a declaraciones en el sentido de 
                    revisar la visión formalista de la Primera Infancia. Si bien 
                    estos esfuerzos activistas no han sido estériles, en general 
                    tampoco han resultado en un cambio en la dirección de la política. 
                    Una de las razones podría ser la inadecuada preparación del 
                    primero de los pasos: el desarrollo de un sistema de datos 
                    para la Primera Infancia de naturaleza integrada y global. 
                  Sección Educación de la Primera Infancia y la Familia, 
                    División de Educación Básica 
                    UNESCO, París  
                   
                 
                
                   
                   
                    Notas de la UNESCO sobre políticas de la Primera Infancia 
                      son una serie de breves notas de temas de políticas acerca 
                      de la primera infancia y la familia. Buscan responder las 
                      diversas preguntas que los elaboradores de políticas puedan 
                      tener acerca de la planificación e implementación de las 
                      políticas de la primera infancia y la familia. Si desea 
                      mayor información o la versión electrónica de los Notas, 
                      sírvase consultar en: 
                      http://www.unesco.org/education/educprog/ecf/html/ecbrief.htm 
                       
                      Sírvase dirigir sus comentarios o consultas a: 
                      UNESCO, 
                      Early Childhood & Family Education Section 7, Place 
                      de Fontenoy, 75352 PARIS 07 SP, France 
                      F. 33 1 45 68 08 12, fax: 33 1 45 68 56 26, sh.choi@unesco.org 
                       
                      Traducción versión en español: Oficina Regional de Educación 
                      para América Latina y el Caribe. UNESCO-Santiago. | 
                   
                   
                 
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