Un concepto es una agrupación
de objetos, acontecimientos o situaciones que:
- Permite reunir todo tipo
de entes discriminablemente diferentes en unamisma clase,
expresándolos como equivalentes.
- Esta agrupación conlleva
la separación de sus componentes de otros entes, considerados
como no equivalentes.
- Se expresa, en toda cultura,
mediante un símbolo o signo de lenguaje.
Los conceptos pueden ser, de modo
general, de estos dos tipos:
* Conceptos naturales cuando
las agrupaciones quedan definidas por características que dependen
de la función asignada por el hombre, o de su hábitat, o
de su comportamiento.
* Conceptos formales cuando
las agrupaciones quedan definidas por características pura y esencialmente
objetivas.
La formación de los conceptos
entraña el seguimiento de los pasos y etapas siguientes:
- Los estímulos del
mundo exterior alcanzan nuestros sentidos y tienen lugar sobre ellos un
proceso de filtración motivado por la naturaleza, tanto de los
estímulos como del receptor.
- Los estímulos ya seleccionados
llegan a las correspondientes áreas del cerebro produciendo
una señal o sensación.
- La interpretación que damos
a todas estas sensaciones, en nuestra percepción, es el percepto.
- A partir del percepto se logra la
formación del concepto mediante estas etapas:
* Discriminación: Los
perceptos se diferencian reconociendo las cualidades comunes y distintas
de los mismos. Así se va estableciendo una clasificación
inicial pues nombrar un percepto es clasificarlo, en parte.
* Generalización: Con
experiencias estimulantes, se confrontan activamente los perceptos diferenciados.
Así se completa la clasificación inicial anterior, generalizándolos.
* Abstracción: Las cualidades
comunes entre los perceptos se van haciendo más funcionales y menos
perceptuales, o sea, menos ligadas a cada percepto concreto. El producto
final de esta abstracción es ya el concepto.
La aparición de
los conceptos en el niño y la niña presenta estas características:
* Los conceptos, por lo general, no
se desarrollan repentinamente en su forma definitiva.
* Los conceptos, normalmente, se
ensanchan y profundizan según progresa el niño y niña
en su desarrollo evolutivo físico e intelectual.
* Sin duda alguna, existe cierta concatenación
entre los conceptos, es decir, los conceptos ya establecidos influyen
en la adquisición de otros conceptos subsiguientes.
* En su mayoría, la formación
de los conceptos se realiza mediante actividades de ensayo/error,
a través de las cuales se determina si un nuevo concepto es incluible
o no en una hipótesis establecida.
* El lenguaje y los símbolos
intervienen en la conceptualización, porque actúan como
marco de referencia, y capacitan al niño y niña para la
adquisición de los conceptos.
La cronología de
la aparición de los conceptos en el niño y la niña
presenta tres niveles:
- Preconceptos: El niño
y la niña son capaces de disociar los objetos de sus propiedades,
sobre la base de su conducta.
Se establecen ya a partir de los 2
años.
- Conceptos contrastados con la
realidad: Son esquemas mentales más elaborados que los anteriores.
Se caracterizan por la necesidad de experimentarlos y de contrastarlos
con la realidad. Por tanto, a las edades que indicamos, solamente se podrán
elaborar aquellos conceptos que sean derivables de la experimentación
y contacto directo con la realidad.
Se establecen ya hacia los 6 años.
- Conceptos reales: Se establecen
alrededor de los 12 años.
A estas edades, los conceptos
son ya generalizaciones y abstracciones que no precisan el contacto
directo con la realidad.
LOS CONCEPTOS MATEMÁTICOS
Los conceptos matemáticos
constituyen un tipo especial dentro de los conceptos formales: Son generalizaciones
de las relaciones entre cierta clase de "datos", haciendo abstracción
total de los objetos y fenómenos particulares en que se presentan.
Los conceptos matemáticos
no pueden lograrse únicamente por la acción directa del
entorno cotidiano, sino solamente de manera indirecta desde otros conceptos
que ya se hayan alcanzado.
Estas características especiales
de los conceptos matemáticos les hace, en alto grado, dependientes
de los maestros o maestras, de su didáctica concreta y de la observación
atenta, activa y muy experimental con que responda el niño o la
niña.
En la adquisición de
los conceptos matemáticos, intervienen de modo claro y evidente,
los factores siguientes:
* Es más sencillo descubrir
un concepto simple (triángulo), que un concepto compuesto
(triángulo verde más triángulo verde grande).
* El descubrimiento y adquisición
de un concepto simple requiere menos experiencias y ensayos que
el de un concepto compuesto.
* Cuanto mayor es el número
de características irrelevantes o distractores presentados
(otras formas, colores, tamaños, etc), más difícil
resulta la adquisición de un concepto.
* En las primeras edades y niveles
conviene un bajo número de distractores, pero a medida que
el concepto se vaya consolidando es útil ampliar el número
de distractores, para que el niño y la niña consigan extraer
las propiedades conceptuales con una mayor independencia de cada caso
concreto e, incluso, del mismo maestro o maestra.
* Para ayudar al niño y niña
a desarrollar los conceptos matemáticos es necesario enseñarles
el lenguaje de la matemática, sus relaciones, sus procedimientos,
sus métodos, su lógica, sus símbolos propios, su
operatividad y cálculo, etc.
* Hay variables difíciles
de controlar porque están relacionadas con el mismo niño
o niña, y que influyen en la adquisición de estos conceptos.
* Cuanta mayor sea la capacidad
discriminatoria del niño y de la niña, respecto de las
características relevantes, más fácil será
la adquisición del concepto.
* Se mejorará la adquisición
de los conceptos conjuntivos (grande "y" amarillo) mediante
la presentación inicial de ejemplares positivos.
* Se mejora la adquisición
de los conceptos disyuntivos (grande "o" amarillo) mediante
la presentación inicial de ejemplares negativos, o mediante la
alternancia de ejemplares negativos y positivos.
* La manipulación, experimentación
y observación activa son base imprescindible para la adquisición
de los conceptos matemáticos, en general, y de modo muy particular
en Educación Infantil.
Entre los conceptos matemáticos
básicos para ser trabajados asiduamente en la etapa de Educación
Infantil se encuentran los siguientes:
* Concepto de objeto-materia:
- A través de relaciones: niño-demás
niños.
- A través de relaciones: niño-objeto.
- A través de relaciones: objeto-objeto.
* El razonamiento lógico:
- Se irá desarrollando en el
niño, de modo globalizado, al tratar los conceptos anteriores.
- Sobre todo, a través de relaciones:
objeto-objeto.
- Se apoyará, fundamentalmente,
en las acciones sobre las colecciones y agrupamientos de objetos.
- Tendrá su mejor ayuda en
la maduración personal del niño y de la niña, a lo
largo de la etapa de Educación Infantil.
* Concepto de número,
con:
- Sus agrupaciones y significado.
- Sus aspectos: cardinal y ordinal,
al realizar clasificaciones y seriaciones.
- Sus operaciones y aritmética.
- Sus aplicaciones a la vida real.
* Conceptos sobre espacio y geometría:
- Mediante percepciones y representaciones.
- Mediante análisis de posiciones
de puntos, líneas, objetos, etc.
- A través de movimientos rígidos,
donde las propiedades métricas de los cuerpos permanecen constantes
(lados, ángulos, paralelismo, perpendicularidad, etc.): espacio
euclidiano.
- A través de transformaciones
proyectivas, donde las propiedades de los cuerpos sufren deformaciones
que dependen de la posición relativa del objeto y su transformado
(sombras, etc.): espacio proyectivo.
- A través de transformaciones
topológicas, donde los cuerpos sufren deformaciones tan violentas
que se pierden las propiedades métricas y proyectivas (proximidad,
separación, encerramiento o clausura, orden o sucesión espacial,
continuidad, etc.) sin llegar al rompimiento: espacio topológico.
- Hoy se estima que los primeros conceptos
infantiles sobre el espacio son de carácter topológico.
* Concepto de longitud, superficie
y capacidad/volumen:
- A través de comparaciones
y relaciones.
- A través de la medida de
objetos reales.
- Mediante el uso de unidades convencionales
diversas.
- Mediante el uso de unidades de sistemas
ya establecidos.
* Concepto de tiempo:
- A través de estímulos
sucesivos.
- A través de estímulos
contínuos que cesan.
- Mediante comparación de estímulos
contínuos.
- Realizando medidas de tiempo real
y su expresión en unidades.
* Concepto de peso:
- A través de comparaciones
sistemáticas.
- A través de clasificaciones.
- A través de ordenaciones.
- Realizando medidas sin unidades
patrón (con arena, etc.).
- Realizando medidas con unidades
patrón.
LA INICIACIÓN MATEMÁTICA
EN EDUCACIÓN INFANTIL
Para un mejor análisis
de la iniciación matemática en el niño y niña
de cero a seis años necesitamos partir de los siguientes supuestos
de la matemática:
* La matemática es una materia
en la que menos se puede prescindir de un iniciador, porque está
constituida por unos conocimientos y procedimientos a los que difícilmente
se accede sin la guía de un buen maestro o maestra en ellos.
* La matemática exige un esfuerzo
mental añadido, porque desemboca siempre en actividades mentales
que exigen un alto grado de abstracción, pues, aunque de
cero a seis años hay que partir siempre de lo concreto, la intención
debe ser superarlo y buscar en ello lo general.
* Precisamente, por desembocar en
lo general y recorrer el camino de la abstracción, la matemática:
- Se construye esquemáticamente,
formal y sistemáticamente.
- Se organiza a partir de axiomas.
- Se decanta y se comunica mediante
lenguajes y códigos especiales, como son: los símbolos,
las figuras, los diagramas, los algoritmos, las estructuras, etc.
* La matemática es una materia
sumamente acumulativa. Unas actividades exigen otras previas, lo
cual requiere comprensión lógica y memoria comprensiva de
los contenidos anteriores. Es decir, saber razonar y saberaplicar
los conceptos o los procedimientos en acción.
* La matemática es una de las
materias más concretas y que menos permite disimular la
ignorancia propia.
* La matemática, hoy, está
en el transfondo de todas las materias. Por ello es imprescindible
su conocimiento activo y aplicativo.
* La matemática debe ayudar
a asegurar que los seres humanos nos comportemos en el mundo de acuerdo
con unas leyes lógicas, no contradictorias y coordinadas entre
sí, tanto en el orden natural, como en el familiar, social,
político, mundial, etc.
* La matemática, más
que una materia, es un bien común al que todos tienen derecho
y que la sociedad espera de la escuela, porque constituye una dimensión
necesaria para la formación de la persona en el mundo de hoy.
* La matemática promueve
virtualidades que son metas educativas, de tal modo que su valor
formativo puede superar quizá su propia utilidad, si es que
fuese posible considerar y sopesar separadamente dichos factores.
* El alto valor formativo de
la matemática viene probado por los efectos siguientes:
a) En el ámbito de
la formación intelectual, la matemática nos enseña:
- A reflexionar sobre las situaciones.
- A considerar y aislar lo esencial
de lo accesorio.
- A desarrollar el juicio, distinguiendo
lo probado, demostrado y cierto, de lo posible y de lo imposible o falso.
- A organizar el pensamiento, ordenando
las ideas, elaborando esquemas, realizando consecuencias y distinguiendo
medios, causas y efectos.
- A formar el espíritu científico
en sus vertientes de: objetividad, exactitud, precisión y espíritu
crítico.
b) En el ámbito de
la formación moral y estética, la matemática
fomenta:
- La necesidad de rigor, de discernimiento
y de claridad en la verificación de pruebas, así como la
discusión formativa.
- El gusto por el orden, la concisión,
la exactitud y la verdad.
- El habito de conocer, indagar y
comprender los principios de las cosas.
- El descubrimiento y la sensibilización
por la belleza de las formas y la organización en la naturaleza
y en la técnica.
- El habito de la aceptación
del mejor criterio probado y la constatación irrefutable del acierto.
* La matemática fuerza a plantearse
diversidad de requerimientos según el tipo de alumno o alumna,
pues unos son más lentos y otros más rápidos en sus
diversas actuaciones matemáticas, lo cual exige una metodología
fina y apropiada para cada niño, niña o grupo de niños
y niñas.
* La matemática, como el lenguaje,
es una actividad en la que los niños y niñas se desenvuelven
con normalidad, si ponemos a su disposición los medios oportunos
par una correcta iniciación. No obstante su práctica asidua
en la vida, quizá sea la matemática uno de los símbolos
donde más errores se cometen.
* El niño y niña son
sensibles al mundo de las matemáticas. En todo lo que crean y en
lo que hacen tienen presente el mundo de los números. Su manera
de ser y su modo de comportarse les empujan hacia el cálculo:
- Su sentido de la propiedad.
- Su afán por el coleccionismo.
- Su gusto por repetir.
- Su deseo de observar.
- Su necesidad de ordenar.
- Y hasta el uso que ellos hacen como
soportes formales en sus juegos.
- Etc.
PRINCIPIOS DIDÁCTICOS PARA
LA INICIACIÓN MATEMÁTICA EN EDUCACIÓN INFANTIL
Lograr una motivación
adecuada es fundamental para el proceso didáctico en Educación
Infantil. Se puede lograr más fácilmente que el niño
y niña se sientan motivados:
* Si se atribuye sentido a lo que
se les pide que hagan.
* Si hay una distancia óptima
entre lo que saben y lo que se propone como nuevo.
* Si tienen la cantidad y calidad
de ayuda pedagógica necesaria y suficiente.
* Si el error se utiliza como fuente
de aprendizaje y no tanto como algo negativo que es necesario eliminar,
sin más.
Los contenidos de enseñanza
y aprendizaje deben partir siempre de experiencias directas, de
este modo:
- Experiencias con materiales manipulativos
concretos.
- Experiencias que partan del juego
según el tipo que corresponda, juego de ejercicio, simbólico
o de reglas, conforme veremos en su momento oportuno.
- Experiencias con procedimientos
y acciones bien organizadas, según pautas muy claras que
dirijan la actuación de cada niño y niña.
- Experiencias que sigan un orden
de prioridades para mejor lograr la construcción y significación
de los conceptos matemáticos que correspondan.
Mediante la verbalización
el niño y l niña evocan las actividades realizadas, ya sea
de modo vivencial o mediante materiales manipulativos. Por esta razón
conviene proponerla como medio didáctico después de realizadas
dichas actividades.
Mediante el dibujo se expresan
gráficamente las funciones de representación. El niño
y niña dibujan su modelo interno, es decir, la representación
mental propia que han elaborado. Ello significa que dibujan el objeto
no como lo ven en una posición concreta, sino que diseñan
todo lo que saben de dicho objeto. En lugar de reproducir un objeto desde
un solo punto de vista, lo dibujan simultáneamente desde todos
ellos, de modo que representan imágenes en las que superficies
de objetos tridimensionales aparecen como desarrolladas sobre un plano
único. Es muy importante tener en cuenta todo esto para la correcta
interpretación evaluativa de los conceptos que se vayan adquiriendo.
En la toma de contacto
de cada niño y cada niña con la experienciaserá
necesario conseguir lo siguiente:
* Alcanzar el conocimiento de los
objetos y sus cualidades o atributos.
* Realizar el descubrimiento de
lo esencial, según sus posibilidades.
* Lograr la generalización
y abstracción conceptuales propias.
Toda experiencia con materiales
manipulativos curriculares debe seguir el método del descubrimiento,
lo cual exige cumplir los "principios básicos del aprendizaje
de la matemática" que son, según Dienes, son los siguientes:
* Principio de constructividad:
La construcción, la manipulación, el juego, deberá
ser siempre el primer contacto con las realidades matemáticas,
pues el niño y niña ven y entienden por las manos.
* Principio dinámico:
El aprendizaje va, de la experiencia a la categorización, mediante
ciclos que se suceden regularmente. Cada ciclo consta de tres etapas:
- Etapa preliminar. Con los
juegos de ejercicios y juegos simbólicos, que inician el
proceso de interiorización.
- Etapa constructiva: Con los
juegos de reglas, mediante los cuales, buscando regularidades se descubren
reglas de comportamiento.
- Etapa de anclaje: En la que
se logra la aplicación del concepto y mejor fijación del
mismo.
* Principio de variabilidad perceptiva:
Para abstraer una estructura matemática debemos encontrarla en
situaciones diferentes. Esto exige la utilización de diversidad
de materiales manipulativos sobre los mismos contenidos lógicos
y matemáticos que trabajemos.
* Principio de variabilidad matemática:
Cada concepto envuelve distintas variables esenciales. Para alcanzar la
completa generalización del concepto es necesario trabajar con
cada una de estas variables de modo independiente, dejando las
demás variables constantes.
El proceso para que los
principios anteriores logren la formación del pensamiento abstracto-simbólico,
exige estas fases:
- Fase manipulativa: Por sencillo
que sea un concepto matemático debe pasar inicialmente por su manipulación
más acomodada.
- Fase verbal: El niño
y la niña deben explicar, a su manera, lo realizado y conseguido.
Esta verbalización marca
el inicio de la comprensión e interiorización de los
conceptos.
- Fase ideográfica: El
niño y niña deben traducir de manera plástica cuanto
hayan descubierto en su investigación:
* Con plastilina, etc.
* Sobre papel grande de embalar.
* Sobre fichas, según su propio
nivel.
- Fase simbólica: Cuando
sea el modo oportuno, el niño y la niña deberán expresar
sus experiencias con símbolos matemáticos, si su utilización
es ciertamente significativa para ellos. Todo esto supone ya un logro
más en la abstracción matemática.
El desarrollo óptimo
de la experimentación propuesta a los niños y niñas
en el "método del descubrimiento", exige el orden y proceso
siguientes, para los distintos ejercicios y materiales manipulativos que
indicamos:
1. Ejercicios con los propios
niños y niñas.
Su objetivo será vivenciar,
desde el propio yo del niño y de la niña, el significado
de sus acciones.
2. Ejercicios con materiales
manipulativos:
- Ambientales.
- Estructurados.
3. Ejercicios realizados:
- Sobre papel grande, de embalar.
- En el suelo.
4. Ejercicios en
fichas individuales de trabajo.
Se realizarán a partir del
momento que se considere oportuno y posible, para cada niño y niña.
El método del descubrimiento
a partir de la experiencia exige establecer gran variedad de ejercicios
de aprendizaje o actividades. Mialaret propone para ellas los tipos
siguientes:
* Actividades de iniciación:
Se realizarán cuando:
- Se presente un nuevo material o
nuevo contenido.
- Se inicien nuevas actuaciones con
el material.
- Se incluyan ciertas novedades o
particularidades.
* Actividades de aplicación:
Versarán sobre lo introducido
en las actividades de iniciación. Se realizarán de modo
individual, una vez lograda su comprensión.
* Actividades de fijación
o entrenamiento:
Presentarán la duración
que cada niño y niña precisen hasta conseguir una suficiente
asimilación.
* Actividades de control:
Mediante ellas conoceremos el momento
de paso a otras nuevas experiencias. Estas actividades pueden realizarse:
- De modo individual.
- En pequeño grupo.
- En gran grupo.
- Dentro o fuera de la "puesta en
común".
Para lograr una abstracción
coordinada con sus diferentes tipos, deberá seguirse este orden,
de acuerdo con su complejidad creciente:
1º Abstracción física.
Realizada como proceso mental que
permite extraer una característica física concreta entre
diferentes y variados objetos.
2º Abstracción funcional.
Realizada como proceso mental que
permite extraer una misma característica funcional entre diferentes
y variados objetos.
3º Abstracción lógico-matemática.
Realizada como proceso mental que
permite establecer relaciones de tipo lógico-matemático
entre diferentes y variados objetos.
4º Abstracción inclusiva.
Realizada como proceso mental que
permite extraer una misma característica fundamental entre diferentes
y variados objetos por el hecho de estar todos ellos incluidos en un concepto
superior.
METODOLOGÍA PARA UNA CORRECTA
INICIACIÓN MATEMÁTICA EN EDUCACIÓN INFANTIL
Como consecuencia de todo lo dicho
hasta aquí y con el fin de realizar una correcta iniciación
matemática debemos tener en cuenta, metodológicamente,
cuanto sigue:
1) La correcta iniciación
en la matemática y su aprendizaje sistemático se inscriben
dentro de los derechos del alumno, que necesariamente ha de satisfacer
la escuela desde los primeros niveles.
Esta corrección exige su iniciación
desde los comienzos educativos, pues su encaje posterior sufriría
decisivamente si no se hace a su tiempo.
Hay momentos educativos que, una vez
"pasados", ya no logran recuperarse nunca.
2) La iniciación matemática,
al igual que la iniciación a la lectoescritura, deberá
realizarse, al menos, con tanto cuidado, atención y celo, como
se hace con otros ritos sociales de iniciación.
3) La iniciación matemática
realizada correctamente, de modo constructivo y significativo, debe poner
las bases para que el niño y niña:
- Se apropien de las invenciones
que han costado miles de años a la humanidad.
- Puedan manejar todo el tesoro científico,
técnico, etc., acumulado a lo largo del tiempo.
4) La iniciación matemática
ha de ser una construcción mental vivida y experimentada paso
a paso. Para conseguirlo con normalidad:
* Debe esta básicamente
motivada mediante los materiales manipulativos curriculares, apropiados
a tal fin.
* Debe ser fuertemente motivadora,
estando conectada con la realidad que se vive, a través de las
actividades oportunas.
* Debe lograr una progresiva asunción
de los conceptos matemáticos, de modo que se consiga un creciente
nivel de dominio de ellos sobre la vida.
5) Además, durante el
desarrollo de toda la iniciación matemática se deberá
tener siempre muy en cuenta que:
- Se ha de cultivar el razonamiento
lógico desde la base.
- No se deberá favorecer el
culto a la buena y rápida respuesta, sin más.
- Se debe aprovechar los errores de
los niños y niñas como fuente de aprendizaje para descubrir:
§ Las sub-lógicas
operantes.
§ El fallo
en el proceso realizado.
§ El punto
en que se inició la desviación del razonamiento correcto.
- Se debe analizar, también,
la actuación del maestro o maestra en el proceso de enseñanza/aprendizaje,
comprobando:
§ La motivación
lograda.
§ El vocabulario
empleado.
§ La presentación,
el tratamiento y el manipulado de los materiales curriculares y didácticos
frente a los niños y niñas.
§ El diseño,
calidad, acomodación, ordenación y cantidad de las actividades
propuestas.
§ El establecimiento
concreto de las situaciones problemáticas o de aplicabilidad a
la vida.
6) Es necesario evitar una
excesiva mitificación de los términos que se usan en la
iniciación matemática.
Trabajar la matemática, ciertamente,
que va a obligar al niño y niña a aprender muchas palabras
nuevas.
El camino a seguir en la iniciación
de estos términos nuevos será ofrecerlos:
§ En contextos
muy significativos.
§ Con la
intensidad oportuna.
§ Con la
extensión conveniente.
§ Con la
insistencia necesaria para que cada niño y niña los asimile
correctamente.
§ Se hará
del mismo modo que con otras palabras, como: clase, recreo, compañero,
compañera, etc., que los niños o niñas no suelen
conocer hasta que no vienen al colegio y que, sin necesidad de explicaciones
especiales, las van incorporando correctamente a su vocabulario.
7) En la iniciación
matemática, se podrán saltar fases previas y se podrán
seguir ritmos más o menos lentos/rápidos, según
lo vaya exigiendo cada niño y niña. Todo esto hace conveniente
plantear una metodología a través de procesos muy bien
agrupados, donde cada "escalón" esté diferenciado del
anterior por un solo aspecto propio.
Así, en el escalón didáctico
en el que el niño y niña no avancen podrá estudiarse
la dificultad típica y concreta que presenta, y solucionarla de
manera específica.
8) La metodología para
una iniciación matemática correcta, teniendo en cuenta las
bases de la Educación Infantil y de acuerdo con los supuestos anteriores,
deberá ser:
* Globalizada, por cuanto se
refiere al modo de programar los contenidos el maestro y maestra.
* Globalizante, en clara referencia
al modo de actuar el maestro y maestra en todo momento.
* Globalizadora, respecto al
modo de percibir cada niño y niña la enseñanza recibida.
9) Por su carácter
globalizador, la etapa de Educación Infantil, de cero a seis
años, deberá realizarse y lograr un desarrollo paralelo
y armónico en cuanto hace referencia a la iniciación matemática
y a la del lenguaje.
Es necesario cuidar todo esto grandemente
ya que se malogran muchos procesos mentales, nociones o conceptos matemáticos
sólo por problemas en el lenguaje que se ha empleado.
CONCLUSIÓN
El maestro y maestra de Educación
Infantil que quieran realizar una correcta iniciación matemática
deberán ser muy creativos, activos y dinámicos, empatizar
perfectamente con todos los niños y niñas según la
edad de éstos y, a la vez, mantenerse muy al día en su formación
psicopedagógica y científica. Todo ello supone, sin duda
alguna, un "arte" singular, vivido en el día a día.